Cuando las actuaciones judiciales dan por seguro que la niña de la Escuela San José sufrió algún tipo de abuso sexual, el Obispado de Rafaela emitió por primera vez un comunicado en el que habla de "presunto abuso", una expresión desacertada y fuera de lugar, máxime por lo sensible que está la sociedad y por respeto a la misma alumna.
EL COMUNICADO QUE NO DICE NADA
"Ante el hecho de un presunto abuso cometido hacia una niña en el ámbito del colegio 'San José' de la ciudad de Rafaela, desea manifestar que la realidad de los abusos nos duele profundamente, y de ninguna manera debe ser ocultada ni encubierta", sostiene. "Toda vez que ocurran estos actos, y más aún cuando los mismos implican ámbitos o sujetos relacionados de alguna manera con la Iglesia de Jesús, no podemos menos -como Pueblo de Dios- que pedir perdón. Perdón en primer lugar a Dios, Padre bueno; a los damnificados, a sus familias y a toda la comunidad, manifestando -a su vez- el deseo urgente de esclarecer los hechos y encontrar al responsable"