


ATE convoca a un paro nacional y marcha al Congreso contra la reforma laboral
POLÍTICA Agencia de Noticias del Interior
- ATE convocó a un paro nacional y movilización al Congreso para el 9 de diciembre en rechazo a la reforma laboral.
- Rodolfo Aguiar calificó el proyecto como “pro mercado” y dijo que busca disciplinar a la fuerza de trabajo; reclamó reapertura de paritarias.
- El sindicato sostiene que la reforma favorece a grandes empresas, permite despidos sin indemnización, extiende la jornada y limita la negociación colectiva.
- Exigen pase a planta permanente de trabajadores precarizados, reincorporación de despedidos y rechazo a privatizaciones y venta de inmuebles públicos.
- Reclaman aumento salarial de emergencia para estatales y jubilados, y la restitución de fondos adeudados a las provincias y del FGS de la ANSES.
- La jornada del 9/12 será un termómetro político: tensión sindical frente a un Gobierno que enfrentará su primer gran test legislativo.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) anunció un paro nacional para el próximo martes 9 de diciembre, acompañado por una movilización hacia el Congreso de la Nación, en rechazo a la reforma laboral impulsada por el Gobierno. La medida será ejecutada el mismo día en que el proyecto comenzará a ser tratado en sesiones extraordinarias, lo que agrega tensión política y sindical a una discusión que se anticipa conflictiva.
El secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, fue quien oficializó la medida a través de sus redes sociales, señalando que la iniciativa oficial “es una reforma laboral pro mercado cuyo único objetivo es el disciplinamiento de la fuerza de trabajo”. Según el dirigente, el Gobierno presenta el proyecto como un mecanismo para mejorar la competitividad y la productividad, pero —según su visión— “eso no va a suceder quitando derechos”. Aguiar también apuntó contra la política salarial para el sector público, reclamando la convocatoria urgente a paritarias y una recomposición acorde al deterioro inflacionario. “Tienen que convocar a paritarias y otorgar una recomposición salarial de manera inmediata. Están soñando en el Gobierno si piensan que van a poder recortar el 10% de la planta estatal”, afirmó.
Desde el sindicato advierten que el proyecto oficial llega en un contexto macroeconómico particularmente delicado: fuerte recesión, altos niveles de precarización, desempleo creciente y trabajadores que multiplican empleos para cubrir necesidades básicas. Ese escenario, aseguran, vuelve aún más preocupante una reforma que, según ATE, “solo beneficia a grandes empresas y multinacionales”. La central gremial sostiene que las medidas incluidas en el borrador buscan “cercenar derechos adquiridos”, permitiendo, entre otros puntos, despidos sin indemnización, extensión de la jornada laboral y restricciones a la negociación colectiva.
En su comunicado oficial, ATE marcó un listado de reclamos que llevará a la movilización del 9 de diciembre. En primer lugar, el rechazo a lo que denominan “Reforma Laboral Regresiva”, cuyo contenido consideran incompatible con la protección del empleo y la estabilidad en la administración pública. De manera paralela, exigen la inmediata reapertura de paritarias y un aumento salarial para los estatales que compense la pérdida de poder adquisitivo acumulada en los últimos meses. También reclaman un aumento de emergencia para jubilados y pensionados, uno de los sectores más golpeados por la inflación.
El sindicato sostiene que la reforma laboral forma parte de un proceso de “desguace del Estado” que incluye recortes de personal, privatizaciones y venta de inmuebles públicos. En ese sentido, ATE exige el pase a planta permanente de todos los trabajadores precarizados, la reincorporación de despedidos y la restitución de fondos adeudados a las provincias. Además, demanda el restablecimiento del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES, al que consideran clave para sostener el sistema previsional.
La convocatoria de ATE se suma a un clima social en el que distintos sectores sindicales y organizaciones de la economía popular analizan sus propias estrategias frente a las reformas que impulsa la administración nacional. La discusión sobre cambios en las reglas del mercado laboral aparece como uno de los ejes más sensibles de la agenda legislativa de fin de año, y su tratamiento en el Congreso podría convertirse en el primer gran test político para el Gobierno en el terreno parlamentario.
Con la fecha del debate ya fijada y el sindicalismo movilizado, el Congreso será escenario de una jornada en la que confluirán tensiones salariales, cuestionamientos ideológicos y la pulseada por definir el rumbo de las relaciones laborales en la Argentina. Para ATE, la pelea recién empieza. Y para el Gobierno, será una señal de cuánto margen político tendrá para avanzar con su proyecto de reformas. En cualquier caso, el martes 9 se perfila como un capítulo central en la discusión sobre el futuro del trabajo en el país.






Milei ordena la interna libertaria para acelerar la agenda de reformas

Crujidos en el bloque kirchnerista: tensiones internas en la antesala de las extraordinarias

La ruta hacia una inflación con “uno adelante”: proyecciones, condiciones y dudas para 2026

Lilia Lemoine y la controversia por el “bullying” en el Congreso


Milei ordena la interna libertaria para acelerar la agenda de reformas

Crujidos en el bloque kirchnerista: tensiones internas en la antesala de las extraordinarias

Lilia Lemoine y la controversia por el “bullying” en el Congreso

Polémica por el nombramiento de Cristian Auguadra al frente de la SIDE

Una nueva doctrina para los servicios: el Gobierno redefine la inteligencia nacional










Un nuevo bloque para reforzar la influencia tucumana en el Congreso








