Perotti habla de drama narco cuando hace casi 4 años que no hace nada
Una vez más, el acto por el Día de la Bandera del 20 de junio fue tomado por la política para enviar mensajes. Sin la presencia del presidente Alberto Fernández, en esta oportunidad el gobernador Omar Perotti empuñó el micrófono y centralizó el acto. Al pie del Monumento a la Bandera reclamó que la disputa electoral no diluya la asistencia nacional contra el narcotráfico que no cede en la ciudad, y pidió que las provincias se unan para no ocultar la problemática.
“El ejemplo de (Manuel) Belgrano nos debe animar en nuestras provincias a dar señales claras de unidad frente a los problemas, forjando los diálogos necesarios para que aún en este contexto electoral tengamos en claro que el delito y el narcotráfico son nuestro enemigo en común”, sostuvo.
Luego, el mandatario afinó el reclamo: “Sumemos esfuerzos y gestos de solidaridad para construir un acuerdo que tenga al colectivo por encima del interés individual, que todo el país tenga claro que en unidad reclamamos por la no violencia en nuestro territorio”.
Además del gobernador, en primera fila, se pudo ver al ministro de Transporte, Diego Giuliano, representante del massismo, al senador Marcelo Lewandowski, precandidato a gobernador del peronismo en acuerdo con Perotti, y al intendente anfitrión, Pablo Javkin, quien minutos antes dijo en Radio2 que en materia de seguridad “En Rosario no se pone lo que hay que poner”. No aclaró si era un mensaje directo para el gobernador o para Nación, pero ruido generó. En representación del Gobierno también estuvo el ministro de Educación, Jaime Perczyk.
Los actos por el Día de la Bandera han marcado varias veces la agenda política. En 2012, la por entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner soltó el icónico “vamos por todo”, tres palabras que fueron una radiografía de una época. Perotti, a pocos meses de dejar su gestión, decidió apelar a un mensaje federal sin demasiado peso.
“No debemos perder el entusiasmo patriótico, el luchar por estas cosas, en alzar la voz en defensa del interior, en defensa de un federalismo real y efectivo, en defensa de la producción y el trabajo, en defensa y el cuidado del poder adquisitivo de los trabajadores”, apuntó.
En otro momento de su gestión podría haberse leído como una suerte de plataforma electoral, pero ya las cartas del gobernador están echadas. Sin aspiraciones a la pelea nacional, ni siquiera con apoyo al plan presidencial de su ladero Juan Schiaretti, el rafaelino se enfoca en la pelea por la Cámara de Diputados provincial.
Fuente: Letra P, sobre una nota de Facundo Borrego