Georgina Barbarossa: "La actualidad te estruja el alma"
Aunque no se reconoce futbolera, Georgina Barbarossa cuenta que "en general me meto en la cama temprano pero cuando juega River trato de esperar hasta el final del partido. Soy de River por mi abuelo, mi madre y mi marido".
-¿Te cuesta madrugar?
-Me acuesto muy temprano y soy organizada, por eso no me cuesta tanto. En la semana no voy a ningún evento ni estreno. A las 20 estoy con el pijama puesto y cerca de las 22, creo, me quedo dormida. De otro modo sería imposible que tenga buen humor a las 6 de la mañana, porque además hablamos mucho con la producción y vemos lo que está sucediendo.
-¿Mirás tele a la noche?
-Hago zapping, miro los noticieros para saber cómo termina el día, aunque mucho no te ayudan, la actualidad te estruja el alma.
-¿Cómo dividís la tarde con tus múltiples actividades?
-Tres veces por semana hago gimnasia, es fundamental para mantenerme, no solo por lo estético sino que a cierta edad tenemos que ponernos en movimiento. Voy a la manicura, a la peluquería a teñirme el pelo, me hago los pies, todas esas cosas que tenemos que hacer las mujeres. Otras veces me toca la limpieza de cutis y aparatología para la celulitis.
-En una época fuiste "adicta" a las cirugías. ¿Por qué?
-Después del asesinato del Vasco, mi marido, en casa vivimos una tragedia y me agarró una especie de culpa y me quise acuchillar. Yo le tenía pánico a la cirugías, tenía pánico de morirme con la anestesia, a morirme en el quirófano. Sucedió una cosa muy rara y ahí me empecé a operar como una loca.
-¿Lo hablaste en terapia?
-Sí, y recuerdo que mi mamá estaba preocupadísima, pero después tomé conciencia. En un punto me estaba castigando, todo fue muy loco. Pero nunca me cambié la cara. Hace poco me operé la rodilla izquierda, no podía caminar ni tirarme al piso para jugar con mi nieta, y gracias a Dios quedé brutal.
-¿El nacimiento de tu nieta cambió tu rutina?
-Sí, tiene nueve meses, entonces en todo el tiempo libre que me queda la prioridad absoluta es Julia, hija de mi hijo Juan. Largo todo para estar juntas. Siento por mi nieta un amor que nunca me imaginé, es distinto. Nos divertimos mucho y a Tomás, el hermano mellizo de Juan, desde que nació su sobrina le cambió un poco el chip con respecto a la paternidad.
-¿En un punto; la conducción desplazó a la actriz?
-Después de "Dulce amor" pasaron tres años y volví nuevamente a la conducción, luego hice muchísimo teatro y volví a la ficción con "Golpe al corazón", años después cociné en "Masterchef". Igual, siempre digo que soy una actriz que conduce, le tengo mucho respeto a los periodistas y a los conductores.
Fuente: Diario Show