Femicidio de Candela Azoya: un detenido reveló cómo fueron las últimas horas con vida de la adolescente descuartizada
Tras las detenciones por el femicidio de Candela Azoya, la adolescente de 17 años asesinada y descuartizada en la zona sur del conurbano bonaerense, uno de los aprehendidos confesó ante el fiscal de la causa que “ella estaba viva”. Otro de los casos de Crónica Policiales más impactantes de la jornada.
El primo de la víctima, Carlos Azoya se presentó con su abogado ante el fiscal José Luis Juárez, de la UFI 12. Hasta el momento, la principal hipótesis para los investigadores radica en que el acusado trasladó a la chica hasta la casa de los hermanos Juan y Fabio Resquín, quienes continúan prófugos, y entre los tres la asesinaron.
En esa línea, en su relato de este miércoles, Azoya, de 23 años, reconoció que junto a su novia llevó a la adolescente, en la tarde del 26 de noviembre, a la casa de los prófugos, ubicada en Terrada al 2900.
“Candela lo quería esperar a Tizi Resquín (hijo de los acusados) pero se hizo casi medianoche, no venía y yo decidí irme. Y mi prima se quedó en la casa (de los Resquín). Ella estaba viva”, fue el testimonio del imputado. En esa línea, Ayoza aseguró: “Soy inocente. No tengo nada que ver en esta causa”.
Hasta el momento son dos los detenidos por el crimen de la adolescente.
Para los investigadores, el detenido aportó muy poco y solo declaró para desligarse de toda responsabilidad en el femicidio. Además, ni siquiera reconoció su vínculo –que varios testigos confirmaron– con los Resquín en la venta de estupefacientes en el barrio. Por otro lado, según las pericias, el cuerpo de Candela no fue descuartizado, sino que el desmembramiento se produjo a raíz de la incineración que hicieron del cadáver.
Hasta el momento, en la UFI 12 continuarán tomando testimoniales con la idea de ratificar o descartar los elementos de pruebas que hay, mientras se busca a los dos prófugos.
Hay dos detenidos
Los dos detenidos por el momento son Carlos Azoya acusado de ser partícipe en el femicidio, y Alan Vega, de 29 años, por haber sido quien ayudó a los Resquín a trasladar el cadáver de la víctima a las vías del Ferrocarril Roca, ramal Haedo, para quemarlo, tal como quedó registrado en un video de una cámara de la zona.
El cuerpo de la adolescente fue hallado, tras un llamado al 911, en el cruce de la calle Facundo Quiroga y las vías del tren. Los policías llegaron al lugar, encontraron un pie humano y una cabeza calcinados entre restos de basura, como también prendas de vestir, que fueron reconocidas por su madre.
Según testigos, la adolescente fue vista por última vez el mismo miércoles de su desaparición, acompañada por un hombre y una chica -el primo y su novia- caminando sobre calle Copihue con sentido hacia calle Voltaire.
Los tres ingresaron en la vivienda que los hermanos Resquín usaban para vender drogas, pero de allí, se los vio salir poco después a Carlos Azoya y a su pareja. A Candela, sin embargo, nunca más se la volvió a ver.
Fuente: Cronica