MODA Por: G24N

Las nuevas Converse con cristales Swarovski parecen salidas de El Mago de Oz

Converse y Swarovski son la última combinación de una zapatilla con los famosos cristales y parece que se está creando una tendencia. Y es que este año hemos visto muchas sneakers optar por el brillibrilli, pero no de la manera en la que lo vimos a principios del 2000 (que también) sino con muchas facetas: recargado, sofisticado, camuflado… Un buen ejemplo de esto es la fantasía multicolor que Salomon y Comme de Garçons realizaron en verano sobre las SR811 Platform, atiborrándolas de todo tipo de joyas.

Nike también ha sido muy fan este año de aumentar el brillo de sus zapas y ha recurrido a la compañía austríaca, especializada en joyería y accesorios de lujo, y en su experiencia en la fabricación de cristales cortados de precisión, para recubrir varios de sus lanzamientos. Las Swarovski x Air Jordan 1 High OG fueron un bombazo en verano, con su swoosh totalmente cristalizado, y tampoco dudaron en sacar dos versiones decoradas de una de sus propuestas fuertes de este año, las Nike Air Max Plus (las elegantes “Moonlight” y la reinterpretación de las “Sunset”).

Operando como marca independiente bajo el paraguas de Nike desde que ésta la comprara en 2003, Converse también ha tenido sus escarceos con Swarovski, como las Chuck 70 De Luxe Squared de Converse x Swarovski que salieron a principios de febrero. Pero aquellas eran un botín de media caña en el que los cristales eran los principales protagonistas y como decimos, lo que se busca últimamente es introducir ese toque de lujo a zapatillas con un fuerte carácter urbano y realizar así un buen contraste. Y en cuanto a Converse, su línea Run Star Trainer es una de sus vertientes más innovadoras. 
 
La suela robusta, gruesa y dentada de goma que continúa por el talón es su característica principal y ejemplifica muy bien el sentido de la zapatilla: aunar la tradición clásica con un toque moderno y más audaz. Los detalles de lona y el logotipo en el costado mantiene la esencia habitual de la marca mientras que las superposiciones de distintos materiales la elevan para un público más atrevido. Pero para atrevida la última iteración de esta silueta, que apuesta por el lujo con un cambio de imagen cortesía de Swarovski.
 
 
La colaboración recibe el apropiado nombre de “Deep Emerald” por ese tono verde bosque con destellos. Las capas superiores se encuentran confeccionadas en ante y satén de primera calidad pero la verdadera magia se encuentra en los paneles inferiores, los cuales están impregnados de cristales de la misma tonalidad. Las joyas están posicionadas de tal manera que en la parte donde no hay cristales se dibuja la estrella y la flecha, el logo más fresco de Converse. El resultado es una vistosa zapatilla con ciertos aires vintage, una pinta muy deportiva y dinámica pero con una acabado premium, y un juego de colores, gracias al canelo natural de la goma de la suela, que combina perfectamente.

Ese verde con toques brillantes no podría venir en mejores fechas, y no hablo sólo de su obvio cariz navideño, pues con el apabullante éxito que está teniendo Wicked, más de uno y una querrá calzarse unas zapas bien chulas y con ese toque “fantástico”. Y es que el verde es un color muy clave en la adaptación cinematográfica del famoso musical de Broadway basado en el mundo de El Mago de Oz. La piel verde del personaje de Elphaba, la Bruja Mala del Oeste, es clave tanto en la historia como en su vestuario y Cynthia Erivo, la actriz que la interpreta, ha realizado un ejercicio de method dressing en las campañas de promoción de la cinta tan cool que todos estamos fritos por vestir de verde y negro este invierno.

Tanto si te has dejado impregnar por la Navidad que se acerca como si quieres “desafiar la gravedad” y viajar la Ciudad Esmeralda, ya puedes estar pendiente de cualquier nuevo anuncio de las Converse Run Star Trainer x Swarovski. Su lanzamiento aún es desconocido pero las marcas han prometido comunicar nuevos detalles de las zapatillas a lo largo de esta semana.
 
 Fuente: GQ España