Pullaro quiere solucionar el conflicto docente y que los maestros se pongan realmente a trabajar
Justo cuando se cumplan tres meses desde la apertura de la paritaria docente, el gobierno provincial volverá esta semana a convocar a los sindicatos que representan a los maestros de escuelas públicas (Amsafé) y de gestión privada (Sadop) a retomar la negociación salarial. Sin medidas de fuerza previstas por los gremios para esta semana, desde la Casa Gris confían en lograr un acuerdo que permita dar continuidad al ciclo lectivo.
El fin de semana XXXL que concluirá este martes le dio aire a la gestión de Maximiliano Pullaro, después de que los docentes rechazaran en forma contundente la oferta de un aumento del 9% con relación al mes de diciembre, que se abonaría en marzo, a lo que se sumaba una cifra del 7,5% por única vez.
La respuesta de los maestros de escuelas públicas y privadas fueron dos semanas de huelga de 48 horas que se cumplieron con un acatamiento casi total. La primera fue el martes 19 y el miércoles 20; mientras que la semana siguiente los educadores pararon el martes 26 y el miércoles 27 en reclamo de una propuesta de aumento que les permita mantener el poder adquisitivo del salario, en un contexto de brutal aumento de la inflación y de recorte de los fondos enviados por el gobierno nacional.
Sin embargo, desde el gobierno provincial se muestran más confiados de poder alcanzar un acuerdo con los sindicatos de maestros. La semana pasada, los gremios de la administración central santafesina (Upcn y ATE) dieron por cerrada la negociación salarial aceptando la oferta de un incremento del 20% remunerativo y bonificable para las categorías iniciales (1, 2 y 3) y del 17% para las categorías más altas (4, 5, 6, 7, 8 y 9) con base a sueldos de diciembre 2023.
"Las paritarias centrales marcan un rumbo. Ordenan la negociación", estimaron voceros de la cartera educativa provincial que, si bien evitaron hablar de números, se mostraron confiados en la nueva reunión con los referentes de los sindicatos docentes.
En tanto, los médicos nucleados en Amra (Asociación de Médicos de la República Argentina) rechazaron la oferta de actualización salarial del 17% de aumento remunerativo y bonificable respecto a los sueldos de diciembre 2023, que la provincia presentó la semana pasada, y definieron medidas de fuerza para el jueves 4 de abril.
Una nueva cita
Si bien aún no hay fecha confirmada para una nueva convocatoria a los maestros, la idea que se maneja en los pasillos del Ministerio de Educación es aprovechar esta semana, corta pero sin medidas de fuerza, para retomar la negociación salarial. Probablemente el encuentro con los sindicatos se desarrolle más sobre el fin de la semana, entre jueves y viernes.
La expectativa de los sindicatos es recibir una propuesta de aumento que supere la última del 9 por ciento, ya rechazada, y que pueda ser presentada en la escuelas donde finalmente los maestros votan si aceptan o no la oferta salarial.
El contexto nacional
Santa Fe es la única provincia de la región centro que aun mantiene abiertas las paritarias con los docentes. Las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos lograron acuerdos temporales que permitieron el inicio de clases.
En febrero pasado, la provincia de Buenos Aires acordó con las autoridades de los gremios que representan los trabajadores docentes un nuevo tramo de aumento salarial del 20% para el segundo mes del año. El acuerdo también incluye el compromiso de reapertura de las negociaciones.
La Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (Uepc) aceptó hace 12 días la propuesta salarial presentada por la provincia de Córdoba. El periodo del acuerdo alcanza hasta el 30 de mayo e incluye aumentos mensuales (correspondientes al 50% del Indice de Pecios al Consumidor) y el pago con fondos de la provincia del Fondo Nacional del Incentivo Docente y del programa de extensión horaria para la escuela primaria.
El 8 de marzo pasado la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) resolvió aceptar la oferta salarial acercada por la provincia, aunque la consideró insuficiente y pidió mantener la paritaria abierta para evaluar la evolución del los índices inflacionarios.
El aumento acordado consistió en una recomposición de 22% para los docentes que cobran el sueldo básico, y mantuvo el 18% para los demás, aunque añadió algunos montos a los adicionales que componen el sueldo de los trabajadores de la educación y así arrimó la oferta al 19% para los que no cobran el básico.
La semana pasada se retomaron las conversaciones salariales.
Con información de La Capital