Con discurso anticasta, Javier Milei volvió a invitar a la casta a firmar el Pacto de Mayo

Tras ocho años de ausencia, un presidente volvió a Rosario para festejar el Día de la Bandera. En esa ciudad y con un discurso anticasta, el presidente Javier Milei volvió a invitar a la dirigencia política a la firma del demorado Pacto de Mayo que se hará el 9 de julio en Tucumán. Esta vez, la convocatoria fue más amplia y alcanzó al empresariado, la Corte Suprema y los gremios. El Gobierno espera llegar a esa fecha con la ley ómnibus aprobada por el Congreso.

En su primer 20 de Junio como presidente, Milei eligió revalorizar el histórico acto al pie del Monumento a la Bandera y lo usó para relanzar el Pacto de Mayo. "Es fundamental que todos aquellos que compartimos la causa de la libertad depongamos las anteojeras partidarias, nos desprendamos de nuestros intereses particulares y trabajemos juntos para establecer el nuevo orden económico", señaló Milei, antes de invitar a la casta a firmar el documento de diez puntos que ayudará a "dar vuelta la página" de la historia argentina..

El viernes pasado, el Gobierno había confirmado la participación del jefe de Estado. Un detalle sorprendió en el Palacio de los Leones: la Casa Rosada no quiso intervenir en la organización del evento, solo se ocupó del operativo de seguridad que incluyó doble control al ingreso y hasta francotiradores en las terrazas cercanas. Como es costumbre, un custodio con un maletín de kevlar acompañó a Milei en todo momento.


El gabinete libertario dio el presente casi en su totalidad. La Casa Rosada puso un avión a disposición de los funcionarios más importantes, de los cuales solo faltaron Santiago Caputo, el vocero Manuel Adorni y el ministro de Economía, Toto Caputo. El gobernador Maximiliano Pullaro y el intendente Pablo Javkin agasajaron a sus invitados, quienes llegaron temprano y disfrutaron de un desayuno en la Galería de Honor de las Banderas de América, mientras esperaban la llegada del Presidente.
La barrabrava de Javier Milei
Desde temprano, miles de personas fueron llegando en un goteo lento, pero constante al Monumento a la Bandera. Cual recital de rock, hubo quienes llegaron con banderas de sus ciudades. La previa se matizó entre aplausos a los veteranos de la Guerra de Malvinas y algunos gritos de los leitmotivs más trillados de La Libertad Avanza. Sin embargo, se priorizaron las banderas y no hubo movilización orgánica del aparato karinista santafesino, a pesar de la indudable fe liberal que reinaba.

Al arribar los protagonistas, la barrabrava presidencial se mostró extasiada con los propios y muy hostil con los anfitriones de la casta. “Milei, querido, el pueblo está contigo” fue el hit de la mañana, que no tardó en transformarse en una silbatina generalizada cuando el locutor anunció a Javkin y que se mantuvo durante el discurso del alcalde. Con Pullaro, el clima estuvo tranquilo hasta que el gobernador le pidió al Presidente que “mire al interior productivo” y le reclamó obras de infraestructura.

El discurso de Javier Milei
Desde las huestes libertarias santafesinas se preocuparon por aclarar que esa hostilidad no sólo no había sido ordenada, sino que no era compartida. Incluso, revelaron contactos previos que buscaron asegurar un tono amistoso y priorizar que el acto sea un éxito. Sin embargo, cuando subió al escenario tras el fuerte discurso del gobernador, Milei optó por no responder los reclamos del radical y ni siquiera se dio por aludido.

El Presidente no pudo, no supo o no quiso modificar su discurso para responder a Pullaro. Esa falta de reflejos se tradujo en una alocución bastante conservadora en sus apuestas, en la que Milei persistió en sus grandes éxitos contra la casta -hasta forzó una reinterpretación de la vida de Manuel Belgrano en ese sentido- pero quedó a contramano con un llamado a trabajar “sin anteojeras partidarias”. Una especie de convocatoria a la unidad nacional a destiempo tras el fuerte discurso del gobernador.

El Pacto de Mayo, ahora en Tucumán
Forzar el llamado a la unidad nacional fue la antesala discursiva que encontró el Presidente para anunciar la reprogramación del Pacto de Mayo y ampliar su convocatoria. La propuesta, ahora, es que el acuerdo se firme “en la noche del 9 de Julio”, Día de la Independencia, en Tucumán. A las invitaciones ya cursadas a los gobernadores y la Corte Suprema, Milei amplió la convocatoria a expresidentes, diputados, senadores y “todos los trabajadores”. Eso sí: condicionó la firma a la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal.

En el final, el Presidente se lanzó a saludar especialmente a Carolina Losada -ambos con pasado de trajín en los sets de América TV- y estrechó la mano de otros funcionarios y legisladores que andaban cerca. Demoró en subir al convoy porque se quedó cumpliendo con los pedidos de fotos y saludos de aquellos que llegaron a imponerse en la valla. Al llegar al helipuerto de Prefectura, a pocas cuadras del Monumento, volvió a demorar su despegue con más saludos. Si algo se llevó de Rosario el Presidente, es la certeza de que el vínculo con su tribuna está aún intacto.

CON INFORMACION DE LETRA P.