Reelección de Maximiliano Pullaro, ¿adentro o afuera de la nueva Constitución?

Midieron fuerzas el radicalismo y el socialismo en Santa Fe. La provincia va a tener reforma constitucional fruto de un amplio acuerdo partidario, pero principalmente por el “núcleo de coincidencias básicas” que sellen los dos partidos que tienen hoy la llave de la política doméstica. La reelección del gobernador Maximiliano Pullaro es la disputa central de la bilateral.

El presidente de la UCR, Felipe Michlig, y su par del PS, Joaquín Blanco, armaron la hoja de ruta, pasaron de lo privado a lo público y empezaron a blanquear los planes de Unidos para Cambiar Santa Fe. El 22 de julio, en la sede del Partido Demócrata Progresista (PDP) en Rosario, extenderán la intención al resto de las fuerzas del oficialismo, para luego ir a dialogar con el peronismo. La base está.

El socialismo se toma el tema en serio y a fondo. Ideó una comisión liderada por el exdiputado Raúl Lamberto y tiene unas 20 personas dedicadas al estudio y análisis de la reforma. El radicalismo se declara reformista y no se queda atrás, pero se esfuerza en apartar a Pullaro de la rosca. Al menos por el momento.


Habrá reforma en Santa Fe
A la par de la necesidad, real y concreta, de la reforma, ambos partidos pulsean por un punto que no es limitante, pero resulta central: la posibilidad de incluir en la nueva carta magna la chance de la reelección del actual gobernador. Que Pullaro luego vaya a tomarla es otra historia, pero conformar un texto de reforma que contemple al mandatario será tema de discusión.
Una de las voces radicales que se sentó en la mesa bilateral estima que el PS, que bancó a Miguel Lifschitz en su trunco intento reformista y reeleccionario, mantendrá la postura ahora. Suena a chicana, pero expone por lo bajo las tensiones que pueden aflorar entre ambos partidos.
En cambio, un socialista que también participó del cónclave no descarta que la reelección de Pullaro se incluya en la hoja de ruta oficialista. Al menos por ahora, no está dentro del “núcleo de coincidencias básicas”.

Nadie quiere poner el carro delante de los caballos para evitar el empioje. Nadie quiere perder algo del orden que consiguió Unidos bajo la conducción de Pullaro. Con todo, si la intención –como todas las patas de la coalición admiten– es sancionar antes de fin de año una ley de necesidad de enmienda constitucional y votar convencionales constituyentes en 2025, hay que resolverlo.

Para resolver el asunto hay que tensionar, no hay otra. El socialismo, que siempre tiene a mano la carta de Clara García, tendrá que blanquear. El radicalismo también tendrá que transparentar si todo el partido banca hoy, a esta altura, una reforma con reelección para Pullaro. “Tienen que sintetizar en una sola propuesta”, señala un dirigente del PS.

Qué hace Maximiliano Pullaro
Pullaro se corre y espera. Por un lado, le permite jugar a la Legislatura, florearse y ganar en visibilidad a sus integrantes en ambas cámaras. Por el otro, esquiva un debate que incomoda en tiempos de antipolítica. “¿Cómo hacemos para que no parezca que esto es de la casta para la casta?”, se pregunta un dirigente radical que se prepara para la discusión.

En ese marco, el gobernador se concentrará en la gestión, en bajar la cantidad de homicidios en Rosario por sobre todas las cosas y en seguir cultivando su provincialismo. Para no quedar marcado, el radicalismo legislativo piensa instalar en la escena pública que de la mano de la reforma se abre el juego para poner en marcha “órganos de control, austeridad, transparencia”. Keywords.

Así mueve el PS en Santa Fe
El socialismo ve una oportunidad en el debate de la reforma. Un camino que arrancó con el ejercicio de conducción en Diputados y continuó entre semana con el ciclo Comunidad de Ideas en Rosario, que tiene por objetivo convertirse en el espacio de debate de temas centrales, con un amplísimo ancho de banda.

Para no perder identidad, el PS fomenta la construcción de un lugar de encuentro entre figuras de la dirigencia empresarial, política y sindical. Prueba de ello es que, en el encuentro sobre reforma laboral, estuvieron presentes, además de García, el ministro de Trabajo y dirigente del PRO, Coco Báscolo, y sus antecesores, el peronista Roberto Sukerman y el radical Julio Genesini. Toda una rareza.

Lo del radicalismo es distinto, está claro. Tiene en Pullaro a una persona que copa y se come la agenda. Michlig ya deslizó más de una vez que lo quiere como futuro candidato a presidente. Por temor o respeto, nadie le hizo la segunda, pero que lo diga el senador no es menor. Por el momento, no es un debate interno en la UCR de Santa Fe, pero la discusión puede que aflore –e incomode– de la mano de la reforma constitucional.

CON INFORMACION DE LETRA P.