La gente se sigue quejando por lo sucia que está la ciudad, pero Viotti no da respuestas

Comenzó todo muy mal, luego parecía que se enderezaba y encontraba el rumbo, pero nuevamente se fue al pasto, desbarrancó. Una ciudad sucia y sin nada que presagie un cambio a corto plazo parece ser finalmente el signo distintivo de la gestión de Leonardo Viotti como intendente de Rafaela.  

No hay obras nuevas destacadas en estos nueve meses de gestión, nada de lo que se anuncia por ahora se concreta y cuando el intendente enumera algo de su gestión lo hace como realizado cuando en realidad son aún proyectos sin visos reales de concreción.

El domingo hizo un descargo en sus redes sociales por las acusaciones que le hacen desde la vecinales y la realidad es que fue un cumulo de inexactitudes y afirmaciones falsas, no llamando a una conferencia de prensa y prefiriendo que nadie le haga preguntas, pero los comentarios, los que dejó, ya que muchos fueron borrados, son lapidarios y elocuentes del descontento generalizado de la gente.

Ayer nuevamente y como lo hacemos en forma habitual, salimos a escuchar a la gente, a preguntarles a los que realmente transitan la ciudad, a los que padecen la ciudad sucia y mugrienta a la que nos obliga a tener este intendente desorientado y extraviado de su rumbo.

Aquí no hay misterios, hay que trabajar y dejar las internas de lado, hay que trabajar y tratar de mirar hacia un futuro político si no pensar que los problemas la gente los tiene hoy y están absolutamente distantes de las ambiciones desmedidas de quienes solo quieren que la política les soluciones sus problemas en vez de ser al revés.