Pullaro va con JP Morgan y Santander a Wall Street

Pullaro en su estadía en Estados Unidos confirmó que va Wall Street con JP Morgan y Santander para que coloquen los 1.000 de dólares habilitados por la Legislatura para obras de infraestructura. 

 La provincia de Santa Fe decidió no esperar más señales de la Casa Rosada y contrató a JP Morgan y Santander como colocadores internacionales para emitir bonos en dólares en Wall Street. La operación busca financiar infraestructura clave y posicionar a Santa Fe como una provincia solvente ante los mercados, aun cuando el gobierno nacional mantiene cerrado el grifo del financiamiento y los envíos discrecionales. El gobernador al mismo tiempo recorre organismos financieros y mantiene reuniones con entidades empresarias en el marco de la gira que lleva adelante por Estados Unidos.

En simultáneo, la macro nacional se recalienta por varios frentes. Uno de ellos es el juicio por la expropiación de YPF, que volvió al centro de la escena tras nuevos escritos del Gobierno argentino en los tribunales de Nueva York. Las señales desde la defensa oficial apuntan a que el equipo jurídico de Nación espera otro fallo adverso de la jueza Loretta Preska, que podría implicar un nuevo golpe millonario para las finanzas públicas.

 

 

A eso se suman las tensiones fiscales y políticas internas: el ministro Luis Caputo alertó que los proyectos de la oposición en el Congreso podrían costar hasta 2,5 puntos del PBI, lo que implicaría un desequilibrio fiscal para los planes de déficit cero y aumentaría la volatilidad cambiaria. El dólar financiero ya opera con presión alcista, en medio de la desconfianza sobre la sostenibilidad del programa económico.

 

 

En el frente externo, el clima tampoco ayuda. Donald Trump, en plena campaña presidencial en EE.UU., impuso un arancel del 50% al acero de Brasil, lo que generó inquietud entre empresas argentinas como Ternium y Aluar, temerosas de que esas sanciones puedan extenderse al aluminio y el acero argentinos si el exmandatario vuelve a la Casa Blanca. Ambos gigantes industriales están directamente vinculados a cadenas de exportación hacia Norteamérica.

 

 
 

Pese a ese entorno desafiante, Argentina cumplió con los bonistas y pagó más de u$s 4.000 millones en intereses por deuda emitida tras la reestructuración. Aunque el gesto fue bien recibido por algunos inversores, los ADRs argentinos cayeron hasta 4% en Wall Street, dejando en claro que la desconfianza persiste.

 

 

En este combo explosivo, la decisión de Pullaro no pasa desapercibida: apuesta a la credibilidad internacional para financiar obras sin depender de la Nación, y en el camino también mide el pulso de un mercado que observa con lupa cada movimiento argentino.

CON INFORMACION DE ROSARIO3.