POLÍTICA Brenda Struminger*

Francos acelera el retorno al diálogo con el Congreso: recibirá a Ritondo junto a Martín Menem en la Casa Rosada

Después de dos semanas de evaluaciones, tironeos internos y pases de factura, Guillermo Francos iniciará desde la semana que viene su retorno a la rosca política con el Congreso. Se había alejado de las negociaciones con los aliados para dedicarse a tiempo completo a su nuevo rol de Jefe de Gabinete. Y había dejado esos complejos e incómodos tironeos en manos del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y del titular del bloque libertario, Gabriel Bornoroni. Pero las sucesivas derrotas legislativas y la amenaza de nuevos reveses en ejes clave obligaron al Gobierno a recalcular, por lo que el funcionario más político de Javier Milei se vio obligado a retomar, en los hechos, el rol que cumplía cuando era Ministro del Interior.

El operativo retorno empezará el lunes, a las 12, con una reunión encabezada por Francos en las oficinas del Interior, seguramente en el Salón de los Escudos. Fueron convocados el jefe del bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo -ya avisó que irá acompañado, como acostumbra, esta vez con las legisladoras Silvia Lospennato y Silvina Giudici, especialista en temas de libertad de expresión y prensa.

Justamente, Ritondo llevará a esa mesa política el reclamo por la nueva reglamentación de la ley de Acceso a la Información pública que impulsó el Ejecutivo, punto central de controversia entre el oficialismo y la oposición dialoguista esta semana. Los diputados del PRO se pusieron en pie de guerra contra esa medida, impulsada por Santiago Caputo. Y Francos recogió el guante: en su primer informe ante el Congreso, anteayer, dio a entender que el Ejecutivo estaría dispuesto a revisarlo. Pero en la Casa Rosada, en off, se mostraron muy duros, y dijeron que no hay ninguna posibilidad de modificaciones. Seguramente en esta reunión quede planteado, blanco sobre negro, cuál es la postura que primará en la tropa libertaria.

Preocupado por la eventual resistencia a su veto total a la ley de recomposición jubilatoria, la gran batalla perdida del Gobierno, Milei había recibido a Ritondo la semana pasada, junto a representantes de los violetas, para ofrecerles a los soldados de Mauricio Macri un gesto político. Los legisladores mostraron aprecio a esa señal, pero con desconfianza. Y después, el pasar de los días, dejaron entrever que los invadían la impaciencia y la decepción. “Quieren cargos”, contraatacaron, el jueves, por lo bajo, desde la Casa Rosada. Y dejaron en Francos la continuidad de las charlas, que no tienen un destino claro.

“Nos pidieron mayor participación y hablar con Francos. Les estamos dando lo que pidieron”, explicaron desde Balcarce 50. Y adelantaron que ellos también buscarán imponer su magra agenda legislativa en la negociación. Es por eso que Francos sumó al ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, que asumió hace ya tres meses con la bandera de la Ley Hojarasca que viene puliendo desde el inicio del Gobierno y que el Ejecutivo aún no envió al Congreso. “Él va a exponer. Los tiempos los decide el Gobierno”, se limitaron a expresar desde la cartera.

En la Casa Rosada demoran el giro para evitar que esta iniciativa, representativa por excelencia del espíritu del gobierno libertario, naufrague en el mar de tensiones con Macri, frente a un Miguel Pichetto cada vez más duro, un radicalismo esquivo y un kirchnerismo con superioridad numérica. Por ahora no hay fecha para el envío, pero la exposición de Sturzenegger el lunes frente a Ritondo intentará, al menos, acercar la iniciativa a las mesas de entrada del Congreso.

Del encuentro participará también el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que viene de días de tensión con el PRO. Sobre todo, desde que se enteró de que Mauricio Macri había vuelto a insistirle a Milei, en su cena íntima más reciente, que lo reemplace por Ritondo. Fue por eso que el titular de la Cámara baja, que responde a Karina Milei, faltó el viernes a la reunión encabezada por el jefe de Estado en el Salón de los Científicos con los dialoguistas. Esta vez, sin embargo, accedió a la convocatoria de Francos y se verá cara a cara con su virtual oponente por el máximo cargo de Diputados. Cerca suyo dijeron que no tienen rispideces con él en particular. “El problema es con Macri, no con Ritondo”, aclararon.

 

 

* Para www.infobae.com