La política de Santa Fe con mujeres al poder

Con un Poder Ejecutivo provincial sin paridad, la Legislatura y los concejos de las ciudades de Santa Fe y Rosario serán cámaras de resonancia para las voces de mujeres de la política santafesina: ellas se quedaron con las presidencias de los cuatro principales cuerpos legislativos. El Senado será presidido por Gisela Scaglia, la vicegobernadora que aportó su cuota PRO a la fórmula para la Casa Gris que lidera Maximiliano Pullaro, mientras que la Cámara de Diputadas y Diputados quedó para Clara García, del PS.

A nivel municipal, los concejos de Santa Fe y Rosario tendrán mujeres radicales al timón: Adriana Molina y María Eugenia Schmuck, respectivamente. En un contexto adverso a la distribución equitativa de puestos, la buena performance electoral de las cuatro, sumada a voluminosas trayectorias, las elevaron a puestos de primera línea para las discusiones y la rosca que se vienen.
 
Scaglia entró fuerte en escena en mayo pasado, cuando Pullaro definió que su compañera de fórmula –por ley de paridad debía ser mujer– sea en acuerdo con sus socios del PRO Evolución, el sector amarillo que respaldó su candidatura desde un principio. A días de asumir en la Casa Gris, la sintonía de la fórmula para la gobernación es muy buena.

Pullaro avisó que empoderaba a Scaglia como jefa del PRO santafesino y le dio la lapicera para que avanzara con designaciones en lugares claves como aeropuertos, puertos y IAPOS, la obra social del empleado público. También responde a ese sector el futuro ministro de trabajo Roald "Coco" Báscolo, concejal de Reconquista y exprecandidato a la intendencia del pullarismo en esa ciudad del norte santafesino en el momento más caliente de la interna con Carolina Losada.

Como vicegobernadora, le tocará comandar la Cámara alta con mayoría de radicales por primera vez en 36 años, pero también mayoría de varones. Además de Scaglia, la única mujer será Leticia Di Gregorio, quien ocupará la banca por el departamento General López en suplencia de Lisandro Enrico, durante el tiempo que éste dure como ministro de Obras Públicas.
Del otro lado del pasillo de la Legislatura, la socialista Clara García se convirtió en la primera mujer en la historia de la provincia en quedarse con la presidencia de la Cámara baja, tras encabezar la lista que conquistó las 28 bancas de la mayoría. En los proyectos que impulsó en el período 2019–2023, se destaca una fuerte agenda feminista, acompañada por sus dos laderas del PS, las diputadas Lionella Cattalini y Gisel Mahmud.

Tras las últimas gestiones, la butaca mayor de la Cámara fue ocupada por el gobernador saliente. Así fue en el caso de los socialistas Antonio Bonfatti entre 2015 y 2019 y Miguel Lifschitz, marido de García -desde 2019 hasta su muerte por Covid en plena pandemia-, al que reemplazó su exministro de Gobierno, Pablo Farías. García será secundada por el radical José Corral y la vicepresidencia segunda quedó para Sonia Martorano, ministra de Salud de la gestión de Omar Perotti hasta el 10 de diciembre.

En la ciudad de Rosario, María Eugenia Schmuck, aliada del intendente Pablo Javkin, fue reelecta como presidenta del cuerpo deliberante. Politóloga y docente universitaria, ocupó una banca en el Concejo por primera vez en 2011, ya lleva tres períodos cumplidos y lo preside desde 2020. Sus pares le reconocen capacidad de articulación y para contener a todas las tribus del Concejo. En las PASO de julio no sólo ganó la interna: fue la precandidata más votada individualmente en la categoría. Ese volumen electoral propio la ubicó primera en la línea de potenciales sucesores y sucesoras cuando Javkin coqueteaba con la posibilidad de competir por la Casa Gris.

En el caso de la capital provincial, por primera vez en los 150 años del Concejo, será presidido por una mujer. La elegida es Adriana Chuchi Molina, abogada radical y feminista, aliada de Maximiliano Pullaro en la última elección y enrolada en la corriente radical del exintendente capitalino José Corral, de quien fue su secretaria de Gobierno.

Molina será el principal enlace político entre la futura administración de Juan Pablo Poletti y el legislativo local. De las 17 bancas, 11 quedaron para el bloque Unidos para Cambiar Santa Fe, otras tres para Juntos Avancemos y luego habrá cuatro monobloques.

Con información de Letra P, sobre una nota de Gabriela Albanesi