La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, se contagia de coronavirus

La presidenta del Gobierno interino de Bolivia, Jeanine Áñez, ha anunciado este jueves que ha dado positivo a la prueba de la covid-19. La mandataria ha asegurado en un vídeo en Twitter de que “muchos” miembros de su equipo también se han contagiado del coronavirus e informó que, pese a no presentar síntomas, permanecerá en cuarentena durante 14 días. “Juntos, vamos a salir adelante”, escribió Áñez. Los casos de contagio en Bolivia suman 42.984 y registran 1.577 muertes, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins.

Además de Áñez, han dado positivo tres ministros de su Gabinete: el titular de la Presidencia, Yerko Núñez, y los encargados de las carteras de Salud y Minería. También están contagiados el presidente del Banco Central y varios parlamentarios.

Bolivia tiene casi 43.000 casos de la covid-19 y superó los 1.500 fallecidos. La velocidad de los contagios ha colapsado los sistemas de salud y los servicios funerarios. Las noticias sobre personas que no encuentran atención en los hospitales y que fallecen en sus casas se publican a diario en la prensa local. Las ciudades más golpeadas son Santa Cruz de la Sierra, Cochabamba y La Paz, la sede administrativa del país.

“Mi solidaridad y deseo de pronta recuperación”, escribió en Twitter el candidato Carlos Mesa poco después de que se conociese la noticia. Mesa disputa con Áñez el segundo puesto en las encuestas de intención de voto para las elecciones generales del 3 de septiembre. Al frente de los sondeos se encuentra el candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), Luis Arce, que no se ha pronunciado sobre el contagio de la presidenta. Tanto Mesa como Arce son críticos del manejo oficial de la pandemia, sobre todo tras un escándalo de corrupción en torno a la compra de respiradores producidos en España.

Jeanine Añez asumió el poder después del derrocamiento de Evo Morales el 10 de noviembre pasado, con el mandato de llamar a elecciones lo más pronto posible. La pandemia retrasó sin fecha la convocatoria electoral, hasta que los partidos de oposición y el Tribunal Electoral acordaron que fuese el 3 septiembre. Tanto Mesa como Arce sostienen que Bolivia debe enfrentar la crisis sanitaria con un gobierno respaldado por los votos.

Fuente: El País