Margarita Stolbizer: "Nada sale en el Senado sin acuerdo de Cristina, hay un pacto con Milei por Lijo"
POLÍTICA16/07/2024 Agencia de Noticias del InteriorMargarita Stolbizer sostuvo la necesidad de incorporar mujeres a la Corte Suprema de Jusitcia y llevar adelante otras reformas legislativas, entre las que incluye la eliminación de las PASO y la regulación de los DNUs. “Estuve siempre en contra de las PASO, creo que es mucho más urgente que el Senado saque lo que es la Ley de Boleta Única”, afirmó en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).
Margarita Stolbizer es diputada nacional por la provincia de Buenos Aires de Hacemos Coalición Federal, el espacio liderado por Miguel Ángel Pichetto. Además es presidente de su propio partido, el GEN. Fue varias veces diputada: por primera vez en 1997, luego en 2009 y en 2021. Además, fue miembro del Consejo de Presidencia de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Latinoamericano. Es una de las legisladoras más opositoras a la posibilidad de que el juez Ariel Lijo ocupe una banca en la Corte Suprema de Justicia.
Independientemente de Lijo, también se habla de una ampliación de la Corte y volver a nueve miembros. Al mismo tiempo, está en discusión si es constitucional o no la posibilidad de llevar adelante juicios a distancia. Me gustaría un panorama de cómo está funcionando la justicia y la Corte en particular.
Creo que el problema de la intención hoy de ampliar el número de miembros de la Corte vuelve a ser poner en clave de negociación política la designación de Lijo, que es particularmente lo que yo rechazo, sobre todo la maniobra de haberlo propuesto conjuntamente con García Mansilla, cuando hoy lo único que hay es una vacante en la Corte. Eso ya está demostrando que lo que tenemos es un pacto claramente entre Milei y Cristina Kirchner porque nada sale en el Senado si Cristina no da el acuerdo para hacerlo. Y como necesitan una vacante que hoy no tienen, y necesitan empezar a negociar con otros sectores, entonces obviamente que lo que aparece es, bueno, ampliamos la Corte y tenemos para repartir. Entonces, más allá de si hace falta ampliar o no, me parece que lo que está mal es la forma.
Y después, formo parte de un colectivo con el que venimos trabajando en el sentido de que debe haber mujeres en la Corte. Es imposible seguir con una Corte toda con hombres. Hay cuatro y se proponen dos más. Y me parece que necesitamos seriamente incorporar una mirada diferente.
¿Se puede decir que todo ese conflicto que ocurre alrededor de quien presidia la Comisión de Juicio Político dentro de Diputados tenga que ver con la posibilidad que pueda considerar el Gobierno de su fragilidad jurídica y que la Corte Suprema de Justicia, así como el Congreso, puede ser un freno a sus ideas e incluso a la continuidad del propio Gobierno?
Nunca me pareció que esto pudiera tener una relación. El conflicto por la presidencia de la comisión de juicio político me parece que tuvo más que ver con una lectura, te diría en clave muy pequeña, de una pequeñez total, como la interna del partido que gobierna. No le adjudico una intención que vaya más allá, al menos ese conflicto.
¿Y la posibilidad de que la Corte sea un freno y que no lo pueda hacer el Legislativo?
Eso sí, por supuesto, pero la Corte no es un freno en la medida en que las decisiones del Gobierno, del Poder Ejecutivo, sean constitucionales o no lo sean. La Corte va a reaccionar frente a aquello que realmente afecte derechos, funcionamiento institucional, la vigencia de la Constitución y todo lo que la Constitución dice. Ahí es cuando reacciona la Corte.
El Gobierno no debe temer tener una Corte en contra si no hace nada que sea inconstitucional. El problema, recordemos, es que se inauguró el Gobierno nada menos que con un decreto, el decreto 70/23, que reformaba 500 normas en un solo decreto, cuando no existía ni la necesidad ni la urgencia, porque el Presidente firma el decreto en el mismo momento que firma la convocatoria a sesiones extraordinarias. Por lo tanto, no existían las razones de necesidad ni de urgencia que habilitan la firma de los DNU.
Y la Corte finalmente no terminó…
Porque está pendiente el proceso legislativo. La Corte no interviene mientras que la salvaguarda siga estando en manos del Poder Legislativo. El Poder Legislativo es el que tiene que terminar ese trámite que es el rechazo o la aceptación por parte de la Cámara de Diputados.
Ahí lo que tenemos es una muy mala ley. Nosotros vamos a empezar a tratar las reformas. Yo tengo uno de los proyectos, pero hay varios. La Ley 26.122, que es la que reglamenta el uso de los decretos de necesidad y urgencia, también de los decretos reglamentarios y de los decretos parciales.
Tenemos esa muy mala ley, que nos dejó Cristina cuando ellos eran Gobierno, que le da al decreto más valor de lo que tiene realmente una ley. La ley necesita siempre la habilitación y aprobación de las dos cámaras, y el DNU, de acuerdo a esa ley, solamente con la aprobación de una Cámara tiene vigencia. Hoy todavía está eso pendiente.
¿No crees que la Corte podría, perfectamente, no haber esperado el plazo, extensísimo, de que Diputados terminase de debatir si rechazaba el DNU 70/23?
No creo que lo haga saltando el trámite legislativo. Además, no creo que lo haga, o hubiera hecho, en los primeros meses de un Gobierno nuevo sobre el cual no veo en la Corte intención de plantear un freno o un obstáculo. Yo no lo estoy viendo hoy.
Alejandro Gomel: El Poder Ejecutivo está pensando enviar de manera inminente al Congreso, por un lado, el proyecto de juicio a distancia, cuando esta semana se cumplen 30 años del atentado a la AMIA, que se presentó la semana pasada en Casa Rosada, y por otro lado, la posible eliminación de las PASO. ¿Cómo ves esto?
Son dos temas bien diferentes y bastante densos cada uno de ellos.
El primero no es juicio a distancia sino juicio en ausencia. En el juicio en ausencia yo tengo presentado un proyecto desde el año pasado y hoy por la tarde vamos a hacer un evento en la Cámara de Diputados, junto con Pablo Yedlin de Unión por la Patria, pero con la convocatoria de varios diputados de distintos bloques, donde van a hablar Pichetto, Ramiro Gutiérrez, Mariana Stilman de la Coalición Cívica, expertos académicos y jueces también.
Yo creo firmemente que es necesario incorporar el juicio en ausencia pero con el carácter excepcional y extraordinario que significa la sola aprobación para los delitos más graves, los que están en el Estatuto de Roma que creó la Corte Penal Internacional, que son los delitos de lesa humanidad, recordemos que AMIA fue declarado un delito de lesa humanidad, genocidio, crímenes de agresión y de guerra.
El viernes a última hora de la tarde ingresó el proyecto del Poder Ejecutivo para proponer también el juicio en ausencia, así que vamos a compatibilizar, hay otros proyectos también, así que vamos a empezar a estudiarlo. Yo tengo una mirada favorable y necesaria, porque creo realmente que los estados tienen el compromiso de garantizar la búsqueda de la verdad y la aplicación de la justicia, siempre pensando en la excepcionalidad para esos delitos, no para cualquiera, y asegurando una cantidad de garantías constitucionales, entre otras que si el acusado está prófugo. Porque recordemos que la razón del juicio en ausencia en estos casos es exclusivamente cuando el acusado por su propia voluntad se profuga y ausenta. Sabiendo que tiene el procedimiento, aún así se le debe resguardar la garantía constitucional que si se presenta tiene el derecho a la revisión si se le ha aplicado una sentencia.
Y el otro argumento fuerte es el de las víctimas. Nosotros tenemos realmente una ley de defensa de las víctimas muy importante, dentro de las cuales el derecho que se les reconoce a las víctimas es justamente el derecho a llegar a la verdad, que se investigue y se haga justicia, entonces es también muy importante que los estados cumplan con la obligación de hacer justicia por todos los compromisos internacionales, por lo que se debe garantizar en la no impunidad de los crímenes más graves y también los derechos de las víctimas.
Podríamos hablar un montón de este tema, pero creo que más o menos ahí queda mi posición.
La otra hay que verla, porque la reforma política, por eso el problema del pacto este que se firmó hace unos días, es un pacto con títulos y no con contenidos, sacaron el título de la reforma política que había estado puesto para el Pacto de Mayo y no sabemos exactamente qué es lo que viene por debajo, porque cuando ellos presentaron la Ley Bases en el mes de diciembre tenía todo un capítulo de reforma política que tenía algunos aspectos que eran impasables, como el tema de las circunscripciones uninominales para las elecciones.
Ahora, en el tema de las PASO yo tengo una posición que es personal, no comprometo en esto mi bloque ni nada, estuve siempre en contra de las PASO. Creo que en algún momento hasta debo haber presentado proyectos para eliminarlas, porque me parece que los partidos y alianzas políticas deben tener la autonomía para decidir cómo designan a sus candidatos. Es muy bueno que lo hagan con procedimientos internos, yo defiendo las internas de los partidos, pero ¿por qué hacer que todos los ciudadanos estén obligados a ir a votar en una elección interna? No es bueno que sean obligatorias. Sí creo que es mucho más urgente que el Senado saque lo que es la Ley de Boleta Única, porque ya a esta altura esa rémora del pasado que son las boletas de papel de cada partido siguen siendo una trampa tremenda que afecta y altera la voluntad electoral. Me parece que eso sería mucho más urgente.
Claudio Mardones: Está sucediendo otro tema que empieza a crecer con fuerza. La Casa Rosada empieza a deslizar su interés de cambiar el funcionamiento y la estructura jurídica de la Agencia Federal de Inteligencia, pero el presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, avanza en la Constitución de la Bicameral de seguimiento de organismos de inteligencia y dejaron al bloque de Hacemos Coalición Federal afuera. ¿Cómo está viendo esto? ¿Cuál es la posición de su bloque?
De mucha preocupación por las dos cuestiones que vos estás marcando.
Por un lado, nuestro bloque había conformado un interbloque a los fines de integrar las comisiones bicamerales y así se había acordado con los otros bloques, y también con la presidencia de la Cámara, porque en la distribución de las bancas. Al firmar más de 30 diputados, nos correspondía un lugar.
Esto tiene que ver con el manejo de la Cámara. Lamentablemente, el manejo viene siendo muy unipersonal y verticalista por parte del presidente de la Cámara, cuando hay decisiones que se deben tomar en el marco de los acuerdos de todos los bloques. Esto no se hizo así, se hizo entre gallos y medianoche. El Presidente puso y designó a los que quiso y dejó a nuestro interbloque con más de 30 miembros afuera. Eso es una falta, para nosotros, realmente muy grave, que afecta mucho el funcionamiento de la Cámara, porque eso nos hace prever que en las otras bicamerales también nos van a dejar afuera. Eso es grave desde lo institucional y el funcionamiento de la Cámara.
Ahora, la otra cuestión es mucho más de fondo, en realidad. Es cómo se va a dar la discusión, no sólo sobre cómo se debería constituir el órgano de inteligencia o de información, sino cómo son los controles.
Yo tengo una posición bastante extrema desde hace mucho tiempo, que es que creo que ni siquiera deberían existir, porque nunca mostraron eficacia, en realidad, y cuando lo que se debería hacer es tener realmente un área de inteligencia que tenga la capacidad de anticipar y disuadir los conflictos, los atentados y demás, nunca se hizo. Para lo único que sirvió siempre fue para manejar fondos reservados sin controles y, obviamente, para hacer espionaje y operaciones de tipo más personal que otra cosa, o de persecución política. Entonces, en la medida en que estas cuestiones no se resuelvan, cómo se llama después, si agencia, oficina o lo que sea, me tiene muy sin cuidado.
Entonces, relacionando una cosa con la otra, lo peligroso es lo que se puede venir detrás de esta idea en la cual excluyen a un bloque como el nuestro, que si algo tiene nuestro bloque en la diversidad de su composición y demás. Lo que nadie nos puede negar es la seriedad con la que tratamos los temas, el equilibrio, la moderación, la decencia que ponemos sobre la mesa, todos quienes integramos este bloque. Por lo tanto, entre otras cosas, no somos comprables ni susceptibles de fijar posiciones de acuerdo a conveniencias. Me preocupa muchísimo todo eso.
El presidente de la Cámara ha prometido tenernos una respuesta sobre los reclamos que nosotros hemos formulado, pero para nosotros eso solamente se satisface en la medida en que saque uno propio, porque puso dos de La Libertad Avanza, que tiene 38 miembros. Por lo tanto, tampoco le entraría a ellos el proporcional en el reparto. Esperamos hoy alguna respuesta.
Con información de www.perfil.com