Fin del Impuesto PAÍS: las alternativas que evalúa el Gobierno para el dólar turista en el verano
ECONOMÍA Carlos Arbia*El Gobierno deberá tomar una decisión antes de fin de año sobre el futuro del dólar tarjeta o también llamado dólar turista que en la actualidad cotiza en unos 1.585 pesos por dólar ya que el 31 de diciembre, desaparecerá el Impuesto PAIS que a partir del 1 de septiembre se redujo del 17,5 al 7,5 %.
Por lo tanto si el Gobierno no toma alguna medida con la finalización del Impuesto PAIS que se aplicó a este tipo de consumos desde 2020 para financiar la emergencia que se declaró en aquel momento se abre un problema.
Sin ese tributo, hoy el tipo de cambio para gastos en el exterior o dólar tarjeta quedaría en la zona de los $1.260 por dólar, más cerca del blue y de los financieros, por lo tanto esto podría llevar a muchos argentinos a viajar al exterior a un dólar mucho más barato que el dólar paralelo y los financieros.
Esto podría provocar un aumento en la demanda de dólares que a su vez podría generar una caída en las reservas internacionales brutas del BCRA que hoy llegan 27.000 millones dólares, en tanto que los depósitos privados en dólares ya superan los 24.000 millones de dólares.
El dólar tarjeta es el más caro que se encuentra en el mercado
El dólar tarjeta cotizó el día lunes en $1.585 y es el más caro que se encuentra en el mercado. Este precio diferencial surge de un recargo del 30% del Impuesto PAIS y el 30% restante corresponde a percepción de Ganancias o de Bienes Personales.
La evolución de la cotización del dólar turista muestra la misma tendencia del resto de las cotizaciones pero es un 15 por ciento más caro que el valor del dólar blue un 60 por ciento. Esa discusión en el equipo económico no es la única ya que está incluida dentro del levantamiento del cepo cambiario que de acuerdo a lo manifestado por las autoridades económicas no hay apuro para levantarlo.
Por lo que pudo saber iProfesional en el equipo económico no están dispuestos a convalidar dólares baratos al turismo en el verano mientras las empresas tengan restricciones para importar insumos que necesitan para producir en la Argentina y se mantenga el cepo cambiario.
Hasta el momento no hay una definición oficial sobre cuándo se levantarán las restricciones al dólar, pero sí una intención que ese proceso sea gradual y a medida de que se corrijan ciertos desequilibrios monetarios. Es decir, que haya menos pesos que puedan para que no se produzca una corrida de los agentes económicos hacia el dólar y más dólares en las reservas internacionales del BCRA para dar certidumbre al mercado. Lo que desde el BCRA llaman la Fase 3 del plan monetario y cambiario.
Fin del Impuesto PAIS: qué alternativas hay para el "dólar tarjeta"
Pero desde el Gobierno tienen claro que deberán tomar alguna decisión para no incentivar la salida de dólares en el verano, una época donde típicamente se acelera el gasto por vacaciones en el exterior entre mediados de diciembre y fines de febrero.
Una de las alternativas que estudia el equipo económico es aplicar un recargo a partir de una percepción mayor de Ganancias o Bienes Personales que hoy llega al 30 por ciento. La otra variante podría ser una reducción de los montos a gastar con tarjeta de crédito y débito en el exterior.
La preocupación del Gobierno es que el abaratamiento de ese tipo de cambio que pagan los turistas en el exterior no profundice la pérdida de reservas internacionales del BCRA.
Por ese motivo el gobierno de Javier Milei analiza aplicar desde el año que viene, cuando deje de existir el Impuesto PAIS, otro recargo impositivo a lo que se conoce como dólar tarjeta o turista y que rige para los argentinos que realizan, por ejemplo, gastos de turismo en el exterior o pagan servicios de streaming. Al respecto un trabajo de la consultora Aurum Valores muestra una relación entre la política oficial de sostener el crawling peg del 2% mensual, que implica un atraso en términos reales.
El informe describe qué "tal como esperábamos se agrava el déficit de la cuenta de servicios producto de la fuerte apreciación real que mantiene el tipo de cambio. El BCRA ya pierde más de 1.500 millones de dólares por trimestre por esta vía, cifra que empeoraría en los próximos meses". En promedio, se puede observar que en los dos primeros trimestres del año se fueron más de 1.000 millones de dólares por ese lado.
Dólar "barato": crece el éxodo de turistas al exterior
El problema es que ese número tiende a crecer, a medida que el peso se aprecia en términos reales frente al dólar. En los dos meses del tercer trimestre en el que los datos están completos, las salidas de divisas se estiman superiores a los 1.500 millones de dólares negativos.
En tanto desde la consultora Econviews que dirige el economista Miguel Kieguel destacan que la balanza turística se vuelve cada vez más negativa, según los datos del INDEC. El informe señala que los argentinos que viajaron vía aérea en agosto fueron 286.162 mientras que los extranjeros que ingresaron a Argentina fueron 239.377 personas. Esto implica un saldo negativo de 46,785 y el destino más elegido por los argentinos, que viajaron por Ezeiza-Aeroparque, fue Europa con 74.800 turistas que se fueron al exterior.
El otro destino elegido fue el Resto de América (que incluye al Caribe) que recibió 48.500 argentinos. Por otro lado, Argentina recibió 76.700 brasileños.
En cuanto a las reservas internacionales del BCRA todavía están lejos de la meta estipulada con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el tercer trimestre del año que finalizó ayer.
Cómo están las reservas del BCRA
Al 30 de septiembre el BCRA debería haber acumulado unos 8.700 millones de dólares más que el nivel de reservas internacionales netas que tenía al momento del cambio de Gobierno. De acuerdo a datos de consultoras privadas la diferencia llegaría solo a unos 2.000 millones de dólares. Para mejorar ese nivel de reservas internacionales netas el Gobierno analiza un préstamo de corto plazo por parte de bancos internacionales que podría inyectar una cantidad de divisas suficiente para,mostrar cumplimiento también en esta meta. Se trataría de un acuerdo de financiamiento entre un grupo de entidades y el BCRA, con garantía de sus títulos en dólares -Bopreal- y oro.
En la última jornada del mes se mantuvo la pax cambiaria de las últimas semanas y con un nivel de riesgo país que finalmente logró perforar los 1300 puntos básicos, el BCRA cerró el mes con un resultado mixto. En contrapartida, las reservas brutas anotaron una fuerte variación negativa al caer 2.000 millones de dólares en el día. Hay que destacar que en el último día hábil del mes suelen producirse este tipo de reacomodamientos, que en esta ocasión llamaron la atención por su magnitud.
Hay 3 factores que señalan fuentes cercanas al BCRA para explicar la caída, que afectó no sólo las reservas internacionales brutas sino también las reservas netas. En primer lugar, se dieron una serie de pagos por unos 300 millones de dólares además de pérdidas por la valuación de diferentes monedas en las que están invertidas las reservas (dólar, euro y yenes, además de los yuanes del swap con China) y, siempre según fuentes oficiales, los movimientos típicos de fin de mes de la PGNME (posición neta global en moneda extranjera) de los bancos.
A partir de ayer el esquema de metas del programa con el Fondo Monetario Internacional que la Argentina firmó y puso en vigencia en marzo de 2022 llegó a su fin. Ahora comenzará un nuevo trimestre de metas con el organismo pero todavía no están estipulados los últimos objetivos de superávit fiscal y de acumulación de reservas exigido en el acuerdo como condición para que el Gobierno pueda conseguir desembolsos del organismo.
Lo que hay que mencionar es que finalizó , tras dos años y medio de duración, esta etapa del programa Extended Fund Facility (EFF) en el que el FMI fue girando a la Argentina los dólares suficientes para cubrir los vencimientos del anterior acuerdo -el Stand By de 2018- ante la imposibilidad del país de contar con dólares propios para afrontar esa deuda. La próxima etapa incluye la devolución de los 45.000 millones de dólares, que el Estado todavía debe, entre 2026 y 2032. La puerta de una negociación hacia un acuerdo nuevo se abrirá en las próximas semanas, lo que podría reconfigurar ese horizonte de mediano y largo plazo en la relación con el FMI.
¿Se cumplieron las metas del FMI?
En términos prácticos, las metas que finalizaron le exigirán al Gobierno argentino una serie de performances macro que, como regla, funcionan como precondición técnica para que el directorio del FMI pueda liberar desembolsos. El programa EFF incluye un menú variado de metas, aunque las centrales son la de acumulación de reservas -un número decisivo para Washington que le permite predecir la capacidad de repago del país- y el objetivo fiscal.
Hay otras como la de emisión monetaria -que bajo el nuevo gobierno dejó de tener relevancia al cortar el Banco Central a cero el financiamiento monetario al Tesoro-, la deuda flotante o a acreedores, intervención en mercados de futuros y un piso de gasto social.
El Gobierno de Javier Milei llega al fin de estas metas con un panorama que incluye el cumplimiento de los objetivos de diciembre, marzo y junio-esto último aún no fue oficializado ya que resta la concreción de la novena revisión técnica trimestral- y con una última foto en discusión, principalmente el acopio de divisas en la autoridad monetaria.
Al último día de septiembre, el BCRA debería poder mostrar que acumuló 8.700 millones de dólares más que el nivel de reservas que tenía al momento del cambio de Gobierno. Fuentes privadas estiman una brecha respecto de la meta de hasta 2.000 millones, según cálculos de la consultora LCG.
Por otro lado, el frente fiscal resultó mucho más cómodo para el Gobierno en esta dinámica de metas que culminará este lunes. La Casa Rosada, tras la llegada de Milei, ofreció al FMI hacer más exigentes las metas como gesto de compromiso para concretar el ajuste de las cuentas públicas lo más rápido posible. El Gobierno quedó, tras el dato del estado de las cuentas públicas hasta agosto, conocido hace diez días, en zona de cumplimiento del piso de superávit fiscal estipulado para fines de septiembre.
El Gobierno se hizo de un "colchón" de excedente fiscal porque septiembre sería un mes más exigente para el fisco
Por un lado, el Tesoro registrará una menor recaudación por la reducción de alícuotas del Impuesto PAIS, que retornó al nivel que tenían al momento del cambio de Gobierno y resentirá así la recaudación tributaria.
Como efecto compensador, por ahora todavía no se conoce en qué magnitud podría darse un crecimiento de ingresos por medidas como la recaudación del blanqueo, la recomposición de Ganancias, la moratoria impositiva o el plan para anticipar el pago de Bienes Personales de los próximos cinco años.
Con el último dato disponible a agosto, el superávit primario acumulado fue de $8,7 billones. Así, quedó bien por encima de la pauta prevista en el programa. Ese excedente fiscal antes del pago de intereses de deuda -que es el número que considerará el FMI- está casi un billón de pesos por encima de la meta de septiembre.
En relación al próximo verano hay que destacar que el turista argentino es siempre uno de los objetivos de los operadores turísticos uruguayos y, luego de una última temporada un tanto decepcionantes, vuelven a poner las fichas en el país vecino donde se darán unas mejores condiciones para que viajen al exterior debido al vencimiento del Impuesto PAIS.
El impuesto PAIS vence a finales de este año en Argentina y los operadores turísticos los efectos que podría llegar a generar en el consumo de los ciudadanos del país vecino en el Uruguay pero también en otros países limítrofes como Brasil y Paraguay.
* Para www.iprofesional.com