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“(Maximiliano) Pullaro gana todo, desde las elecciones en el Colegio de Abogados de Rosario, hasta los comicios de Newell´s y pone al presidente de la UCR nacional“, dijo resignado un connotado dirigente opositor en una de las tantas despedidas de año de las que se multiplican en este agobiante diciembre. Y no está lejos de la realidad: Desde su resonante triunfo en las elecciones a Gobernador en 2023, pasando por la selección de los convencionales constituyentes y las elecciones provinciales de este año; sólo perdió en las nacionales de octubre para diputados nacionales donde quedó relegado a un tercer puesto. Hay que decir que en los comicios para concejales y jefes comunales el peronismo sumó más votos, pero el frente del mandatario consiguió triunfos en más localidades.

 
A dos años del inicio de su mandato los logros políticos del gobernador más ambicioso desde la recuperación de la democracia, se multiplican. Consiguió la reforma y su reelección, pasó a retiro a los más hostiles y poderosos ministros de la Corte, dominó por completo el Ministerio Público de la Acusación y enfrentó sin piedad a los sindicatos estatales. Es cruel también con los trabajadores del Estado a los que les pagará el aguinaldo el 23 de este mes, sólo por capricho y para disciplinar. Nunca había pasado.

Viene de conseguir en extraordinarias el Presupuesto 2026, la prórroga en la emergencia en seguridad y la reforma tributaria para el año próximo; entre otros proyectos de interés para su administración. Antes también, la autorización para endeudarse en dólares y un poco más atrás consiguió una retrógrada reforma previsional que sería envidia hasta de los libertarios.

La tentación de muchos referentes de distintos partidos es matemática. Calculan que Pullaro perdió desde el 2023, primero unos 400 mil votos y luego casi 600 mil. Si bien las sumas y restas son así, el escenario político real refiere que el gobernador sacó menos votos cuando le tocó dividir entre tres, cuando apareció en el juego en Santa Fe el partido de Javier Milei.

Los resultados más contundentes de Pullaro no son sobre la oposición sino sobre su frente interno. No tiene rivales en Unidos. A dos años de la conformación del frente partidario ni siquiera tuvo que desgastarse en alguna fricción con socialistas y macristas; ambos reducidos a sus mínimas expresiones y con los intendentes de las principales ciudades, Rosario y Santa Fe, totalmente dependientes de recursos y directivas políticas de la Casa Gris.

Ningún gobernador de Santa Fe desde 1983 tuvo la cancha tan despejada. Por eso es que logró el acuerdo para reformar la Constitución Provincial, el esquivo premio mayor de esta provincia. Por supuesto que la coyuntura no carece de méritos propios y verdadero liderazgo, pero también es cierto que las condiciones fueron y son inmejorables.

Pullaro es también un líder de estos tiempos, con raíces en la política tradicional, pero con una dosis imprescindible de personalismo que es clave para la velocidad que requiere hoy el proceso de toma de decisiones ante una sociedad que demanda también a alta velocidad.

“La abstención es en este caso aprobación”

“Milei es una bolsa de vidrios, no sabés por dónde agarrarlo”, graficó un experimentado operador político que recorre con frecuencia la autopista Rosario-Buenos Aires. La referencia no es hacia la imposible relación personal con el presidente sino que indica la dificultad que plantea el doble juego de ser opositor sin caer en las redes peronistas.

Algo de esto se vio esta semana donde Pullaro “hizo la del tero: Gritó acá y puso los huevos en otro lado en el Congreso de la Nación”, dijo el diputado nacional del Frente Renovador, Diego Giuliano. “Es increíble que los diputados de Pullaro hayan optado por una tímida abstención ante un Presupuesto que les elimina el fondo del transporte”, agregó el diputado y destacó que la hoy diputada y hasta hace unos días vicegobernadora Gisela Scaglia “pedía la abstención cada tres minutos para que quede constancia de que ellos no quieren rechazar lo que dice Milei”. Para Giuliano “si se abstiene no se opone y si no se opone, Pullaro está admitiendo la obra pública cero, las rutas destruidas en la provincia, no cobrar la enorme deuda nacional con la Caja de Jubilaciones, y hasta la desaparición de los trenes y el fondo para el transporte”.

Los diputados peronistas de Santa Fe son más contundentes: Aseguran que si Pullaro y los diputados de Provincias Unidas “votaban con nosotros hubiésemos tenidos las obras para Santa Fe incluidas en el Presupuesto nacional”.

La diputada Caren Tepp Tepp señaló que, si bien el gobierno logró construir una mayoría para darle un sustento legal a su programa de ajuste económico, basado en el deterioro de la calidad de vida de los argentinos, la oposición consiguió ponerle un freno a elementos importantes.

Entre las victorias legislativas más sensibles, destacó que se logró evitar la derogación de la Ley de Financiamiento Universitario y la Ley de Emergencia en Discapacidad. Además, se consiguió sostener que las Asignaciones Familiares y la Asignación Universal por Hijo sigan actualizándose por el índice de inflación, y se mantuvieron los subsidios al gas para el sur de la provincia de Santa Fe.

Pero el Presupuesto Nacional 2026 con media sanción en Diputados, implica una pérdida significativa para la ciencia en Santa Fe y el país, al eliminar la ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, que establecía un aumento progresivo hasta el 1% del PBI.

Para la provincia el impacto es en Universidades y organismos: Los fondos para investigación universitaria cayeron drásticamente en años anteriores y el presupuesto 2026 no revierte esta tendencia, afectando a instituciones como el CONICET Rosario y agencias locales, dejando sin financiamiento a proyectos cruciales.

Además, la reducción de Fondos Específicos ya que se prevé una caída real en partidas destinadas a Programas Nacionales Estratégicos de Ciencia, Tecnología y Vinculación, a pesar de que el gobierno nacional pueda argumentar un aumento nominal.

El gobierno provincial y la comunidad científica de Santa Fe han manifestado su preocupación, viendo en el presupuesto nacional un retroceso para el sector y un riesgo para el desarrollo productivo y social de la provincia.

Santa Fe, como parte del sistema científico nacional, enfrenta un escenario de desfinanciamiento y pérdida de marcos regulatorios clave, lo que impacta directamente en sus capacidades de investigación, desarrollo e innovación, comprometiendo su futuro y el de sus instituciones científicas.

CON INFORMACION DE PAGINA12.

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