Raúl Pagès gana el primer Louis Vuitton Watch Prize para creativos independientes

La ceremonia, celebrada en la fundación artística de Vuitton diseñada por Frank Gehry en el Bois de Boulogne de París, atrajo a todo tipo de relojeros distinguidos y a un grupo de ejecutivos de LVMH, encabezados por el presidente y CEO,
Bernard Arnault.
 
Pagès recogió un premio en metálico de 150 000 euros y un trofeo en espiral de plata maciza, que evidentemente iba dentro de una caja estampada con el monograma de Vuitton.

Pagès creó el RP1, "Régulateur à Détente", un reloj de pulsera de cuerda manual elaborado en acero inoxidable con una construcción única que incorpora un calibre propio y, en general, un nuevo aire pop brutalista.
 
"Me gustaría dar las gracias a Louis Vuitton y a Jean Arnault por este increíble premio. Y quiero decir a los cuatro finalistas que siento la mayor admiración por su trabajo. Lo más importante es que están haciendo soñar a una futura generación de relojeros", declaraba un emocionado Pagès, antes de decirle a su mujer Nathalie lo mucho que la quería.
 
Era uno de los cinco finalistas de una lista en la que figuraban Petermann Bédat, de Gaël Petermann y Florian Bédat, relojeros independientes desde 2017; y el relojero independiente Simon Brette, cuyo reloj Chronometre Artisans mezcla neoclasicismo y toques art nouveau. John-Mikaël Flaux, otro relojero independiente mostró L'Abeille Mécanique (abeja mecánica) de oro y plata verdaderamente surrealista. Con un mecanismo figurativo único en su género y un indicador de horas de "aguijón".
 
Andreas Strehler y Enrico Santoni idearon el "objeto del tiempo" Tischkalender Sympathique, un calendario mecánico perpetuo de sobremesa de latón dorado engastado con lapislázuli.
 
A juzgar por la enorme competencia, fue sorprendente que ganara el discreto reloj RP1 de Pagès.

 El reloj ganador - Courtesy

"Aposté con mi equipo a que recibiríamos 100 candidaturas, y habría estado feliz de ser así. Al final, recibimos más de 1000", comentaba Jean Arnault, director de relojería de Louis Vuitton, que concibió la idea del premio.
 
Estos cinco relojes únicos se expusieron en el vestíbulo de la elevada estructura de Gehry.
 
Frank Gehry fue uno de los nombres distinguidos de un jurado semifinalista formado por 45 miembros, entre quienes se incluían dos diseñadores: Kim Jones y Marc Newson.
 
La primera lista de expertos incluía también al maestro grabador Dick Steenman; la esmaltadora Anita Porchet; los maestros relojeros Philippe Dufour y Denis Flageollet; y Evelyne Genta. Los miembros del jurado se encargaron de reducir la lista de 1000 a solo 20 candidaturas, antes de que un segundo jurado más pequeño la redujera a cinco atendiendo cinco criterios: diseño, creatividad, innovación, artesanía y complejidad técnica. Teniendo en cuenta quién fue el ganador, la complejidad técnica se llevó el primer premio.
 
El presentador de la edición de este año fue el conocido editor y amante de la relojería Wei Koh, que recibió un montón de aplausos al calificar a Jean Arnault como un "líder único en su generación".

"En nombre de toda la industria relojera, quiero agradecer a Dios que no escogieras la piel o las fragancias de moda, sino los relojes. Te queremos", destacó.
 
LVMH tiene previsto organizar este Premio con carácter bienal a partir de este año. El objetivo a largo plazo es celebrar los nuevos talentos. El concurso lo organiza La Fabrique du Temps, o Fábrica del Tiempo, de Louis Vuitton, con sede en Suiza.
 
Pagès también disfrutará de un año de asesoramiento personalizado de La Fabrique du Temps. Abarcará el asesoramiento de profesionales de la comunicación, los derechos de autor, los aspectos jurídicos de la empresa, el marketing, la estrategia industrial y la gestión financiera.
 
Jean es el quinto y más joven de los hijos de Bernard Arnault, presidente y CEO de LVMH, accionista mayoritario del gigante del lujo y el hombre más rico de Europa.

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