Argentina alcanzó este año un récord histórico de donación de órganos

SALUD Y NUTRICIÓNAna COHENAna COHEN
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Argentina cerró el año 2025 con un importante avance en su sistema de trasplantes, alcanzando cifras históricas en donación de órganos y tejidos. Por primera vez desde la pandemia, el país superó de manera sostenida los récords previos en este ámbito.

El anuncio fue realizado en el último Consejo Federal de Salud (Cofesa) del año, donde se destacó una transformación estructural en el sistema, que incluye mejoras médicas, decisiones políticas y un cambio cultural por parte de la población.

En 2025, se registraron 938 donaciones de órganos y 1,242 de tejidos, superando las cifras de 2019 y 2024. Además, un total de 4,497 personas recibieron trasplantes, mejorando significativamente su calidad de vida. Esta estrategia nacional busca reducir la brecha entre la creciente demanda de trasplantes y la disponibilidad de órganos.

Desde el INCUCAI, se subrayaron varias iniciativas clave para incrementar la disponibilidad de órganos, como el Programa Procurar, que establece Unidades Hospitalarias de Procuración de Órganos y Tejidos (UHPROT). Este modelo intrahospitalario mejora la detección y tratamiento de potenciales donantes. También se mencionó la capacitación de más de 580 profesionales de la salud en los últimos dos años.

El COFESA, liderado por el ministro de Salud Mario Lugones, revisó los avances del año y delineó metas para el Plan Estratégico Federal de Donación y Trasplante 2026-2028, que busca consolidar estos logros y agilizar los procesos de trasplante.

Los datos revelados indican un crecimiento significativo: de los 4,497 trasplantes, 2,349 fueron de órganos y 2,148 de córneas, destacando 1,674 trasplantes renales y 124 cardíacos. Además, se realizaron 291 trasplantes en pacientes pediátricos.

A pesar de los avances, más de 7,200 personas siguen en lista de espera, lo que refleja la necesidad constante de órganos vitales. Un desafío adicional es que solo el 1% de la población tiene muerte cerebral y, de ese porcentaje, no todos pueden donar.

La "Ley Justina", aprobada en 2018, presume la voluntad de donación en adultos, buscando así aumentar las donaciones. Sin embargo, se enfatiza la importancia de registrar esta voluntad y comunicárselo a la familia.

Otro desarrollo significativo fue la implementación de la donación en asistolia, que permite la obtención de órganos de personas con paro cardíaco. Esta técnica, respaldada por un marco legal, espera ampliar el número de donantes efectivos.

Para el futuro, el Plan Estratégico apunta a mejorar la respuesta frente a la creciente demanda de trasplantes, fortaleciendo la procuración en hospitales y consolidando redes provinciales.

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