

Los accidentes de tránsito se suceden sin solución de continuidad y no parece que el gobierno de Viotti tome real conciencia del flagelo que significa. La falta de una política de Estado seria y llevada a cabo por especialistas lleva al caos que hoy es transitar por las calles de la ciudad. Automovilistas prepotentes, transeúntes mal educados y un profundo desconocimiento de las normas de tránsito, son un combo explosivo.
Desde la Municipalidad no comprenden las reglas bajas para disminuir los accidentes, no hay campañas serias y sostenidas de educación vial y no es que no se gasta dinero en pautas oficiales, simplemente las mismas son para comprar voluntades y ni siquiera tienen la capacidad de convertir ese "regalito" que se les da a algunos medios para que hablen bien de la gestión o simplemente no hagan preguntas molestas, en campañas de educación vial.
En materia de control en las calles de la ciudad, cualquier novato en la materia sabe que las premisas principales a la hora de organizar una campaña sería de control de tránsito por las calles de la ciudad es : "Presencia, permanencia y rigurosidad", no existe otro camino. Sin embargo la Municipalidad hoy tiene un plan netamente recaudatorio y para nada educativo, solo les interesa facturar, que la gente se muera les importa poca.
Viotti debe poner énfasis en el cuidado de la vida de los rafaelinos y rodearse de gente idónea en el tema, no poner a amigos o pagar compromisos políticos.
Las personas que hoy tienen la responsabilidad de cuidar la vida de los que diariamente transitamos por las calles de la ciudad no están capacitados para hacerlo simplemente por que no se prepararon para ello, son como máximo voluntariosos, pero con ello no alcanza, hay que estar preparado y demostrarlo con hechos.
Los índices de aumento de accidentes aumentaron notablemente, eso se puede ver simplemente viendo las crónicas policiales, no hace falta que se gasten en inventar estadísticas o gastar dineros públicos en centros de monitoreo integrados por neófitos e ignorantes en el tema.
Debemos exigirle al intendente Viotti que sea responsable y cuide a sus vecinos, la situación a la que se llegó es límite, no se puede seguir esperando.
Debe comprender el intendente que es esencial tomar medidas para mitigar los riesgos y promover una cultura de seguridad en las calles de la ciudad.
Una de las formas más efectivas de lograr esto es a través de campañas de concienciación sobre seguridad vial, pero también la rigurosidad juega un papel fundamental y ahí no tiene que existir miramiento alguno.
De nada vale tener presencia esporádica en lugares neurálgicos de la ciudad, la presencia debe ser continua y sostenida en el tiempo.
El no uso de cascos de los motociclistas es otra de las transgresiones a las normas de tránsito que la Municipalidad poco y nada castiga, tampoco la prohibición de vender combustible a quien no lleve casco puesto tiene un nulo control.
Los transeúntes también tiene responsabilidad y no existe ni campaña al respecto ni algún tipo de sanción. Se cruza la calle por cualquier lugar y poco y nada se respeta la senda peatonal, aquí también una campaña seria y responsable contribuiría en gran medida.
En fin, nada de lo que se está haciendo está bien, todo es improvisación y mientras tanto los accidentes son una moneda corriente. En materia de tránsito, la vida de los rafaelinos está en manos de advenedizos inescrupulosos deseosos solo de cobrar sus sueldos a fin de mes sin importarles nada la vida de los rafaelinos que en materia de tránsito tiene que cuidarse solos y rezar.



